
Escribo este artículo porque me he dado cuenta que últimamente me preguntan bastante por estos conceptos -Slow Parenting y Mindful Family-, que simplemente, están relacionados con la PATERNIDAD o la MATERNIDAD CONSCIENTE (aunque como los nombres vienen en inglés suenan mucho más grandilocuentes de lo que significan en realidad…o así lo veo yo).
Supongo que lo que ocurre es que sin saber, relacionamos Mindfulness con Meditación y por extensión, imaginamos que llevado a la familia se convierte en un hogar silencioso, donde predomina la calma y en el que las actividades que se realizan con niños son algo así como Yoga, pintar mandalas o meditar todos juntos. Sin conexión a internet ni TV.
Bueno, si consigues llegar a este estado la mayor parte del día y todos los miembros de tu familia te siguen, no puedo más que mostrarte mi admiración y felicitarte por ello. Yo no lo conseguí.
Pero desde mi punto de vista, no es necesario llegar a este punto para ser una Familia consciente. Para mí es más sencillo (aunque llevarlo a la práctica es más complicado de lo que pueda parecer).
Empezaré por contarte lo que No es para aclararte las cosas:
- No es necesario saber de Mindfulness o de Meditación para ser Padres Conscientes. Para tu tranquilidad, te diré que los niños son, por lo general, maestros en el arte de estar presentes si les dejas (de eso va Mindfulness y la meditación).
- Tampoco se es un padre/madre consciente por hacer determinadas actividades (como pintar mandalas, hacer yoga en familia…) Aunque si os apetece hacerlas fantástico, será divertido.
- Es bastante complicado pretender ser una madre/padre consciente las 24 horas de los 7 días de la semana…seguramente tendrás otras responsabilidades que atender, así que no te sientas culpable por ello.
Dicho esto, algunas claves de lo que significa una Maternidad/Paternidad consciente son:
- Primero: ocupate de ti mismo/a: busca espacios en el día para bajar de revoluciones, relajarte, hacer una pausa. De esta manera podrás estar más atento/a a lo que necesita tu familia y no reaccionarás de manera automática.
- Recuerda que como madres/padres, todos somos imperfectos. En todas las familias hay momentos estresantes difíciles de manejar, forman parte de la dinámica familiar. Así que sé amable contigo mismo/a, otro día lo harás mejor.
- Busca momentos con los que conectar con los miembros de tu familia uno a uno, individualmente. Hacer cosas todos juntos es genial, pero nos impiden conectar con nuestra pareja y/o cada uno de nuestros hijos de manera más profunda y disfrutar de ellos realmente.
- Observa con curiosidad a tus hijos, como si no los conocieras. Intentando descubrir cómo son en realidad, sin las expectativas que puedas tener acerca de ellos.
- Ponte a su nivel, juega a lo que ellos/as les gusta jugar, haz lo que les apetezca hacer, al menos algún rato en el día y no intervengas corrigiendolos si es su juego.
Naturalmente, hay algunas actividades que pueden favorecer todos estos factores, pero lo importante es la actitud con la que las afrontas. De nada sirve colorear un cuento con tu hijo/a si mientras, en tu cabeza, estás pensando en lo que harás para cenar. Y como te contaba antes, para tener una buena actitud tienes que ocuparte de tí y calmarte, estar realmente dispuesto/a a pasar un tiempo de calidad con tus hijos.
En realidad, eso es lo que ellos esperan de ti: tu atención.
Si quieres saber más, he empezado un experimento en mi INSTAGRAM donde muestro alguna de las actividades que voy haciendo con mis hijos estas vacaciones. No porque considere que tengo la familia más “Mindful” del mundo, pero intento seguir los puntos que te acabo de contar.
Me encantaría que me contaras lo que tu haces con tus hijos/as de manera consciente, como disfrutáis juntos, así vamos creando comunidad.